Tanzania, conocida por su biodiversidad y paisajes volcánicos, está emergiendo como un jugador clave en la producción de té a nivel global.
Mientras que países vecinos como Kenia dominan el sector, Tanzania está consolidando su lugar en los mercados internacionales gracias a su creciente producción de té negro, ortodoxo y verde, con un enfoque claro hacia la calidad y la sostenibilidad.
Desde sus experimentos iniciales con el cultivo del té en 1902, hasta su situación actual como importante productor de té negro, ortodoxo y verde, Tanzania ofrece a los profesionales del té un abanico de posibilidades para explorar.
A medida que el país avanza hacia la producción de tés de alta calidad, su potencial para captar la atención de los mercados internacionales no hace más que aumentar. En este post, exploraremos cómo el dinamismo de Tanzania, su tradición en el cultivo del té y su enfoque en la sostenibilidad pueden abrir nuevas oportunidades en tu negocio.
Historia y evolución de té de Tanzania
El té llegó a Tanzania en 1902, cuando los colonos alemanes decidieron experimentar con el cultivo de esta planta en la región costera de Tanga. Sin embargo, la industria del té no comenzó a despegar realmente hasta la década de 1920, cuando se establecieron las primeras plantaciones comerciales.
Tras la Primera Guerra Mundial y la posterior administración británica del país, el té se cultivó principalmente en grandes plantaciones de propiedad extranjera, siguiendo el modelo que había sido exitoso en otras colonias británicas como Kenia.
A lo largo de las décadas, la industria del té en Tanzania no experimentó el mismo auge que en otros países africanos. Sin embargo, la independencia de Tanzania en 1961 abrió nuevas oportunidades para el sector agrícola, incluido el té.
Aunque gran parte del té de Tanzania se produce utilizando el método CTC, conocido por su robustez y alto contenido de cafeína, en los últimos años ha habido un resurgimiento en la producción de té ortodoxo.
Esto ha atraído la atención de los mercados más exigentes. Plantaciones como las de Luponde, situadas a 2.200 metros sobre el nivel del mar, han demostrado que el té tanzano puede competir con los mejores del mundo.
Zonas de cultivo y producción de té en Tanzania
El paisaje de Tanzania, de terreno volcánico, altitudes elevadas y clima variado, crea condiciones ideales para el cultivo de té.
Aunque Tanzania es menos conocida que otros gigantes del sector, este país ofrece regiones de cultivo únicas que producen tés con características distintivas y de alta calidad.

Las Tierras Altas del Sur
Las Tierras Altas del Sur de Tanzania son el corazón de la producción de té de calidad en el país.
Mufindi y Njombe
Zonas como Mufindi y Njombe se encuentran a altitudes entre 1.700 y 2.200 metros sobre el nivel del mar, lo que proporciona condiciones ideales para el cultivo de tés ortodoxos. Estas plantaciones están rodeadas por montañas volcánicas, lo que hace que el suelo sea muy fértil y rico en nutrientes.
Luponde
Lo que hace particularmente interesante a esta región es la finca de Luponde, que se encuentra a una altitud impresionante de 2.200 metros.
Aquí se cultivan tés ortodoxos, verdes y blancos, que son muy apreciados por su calidad y sabor único. Las hojas de té de Luponde son conocidas por su apariencia atractiva, con puntas doradas que reflejan el uso de variedades clonales superiores.

Kibena
En otras partes de las Tierras Altas del Sur, el té se produce mediante un sistema mixto de cosecha mecánica y manual, lo que permite a los productores mantener altos estándares de calidad y eficiencia.
Kibena, una de las plantaciones más conocidas de la región, es un excelente ejemplo de cómo la producción mecánica puede coexistir con la calidad en tés de alta gama, como el té brillante e intenso que esta finca produce.
Usambara
La región de Usambara, ubicada en la costa noreste cerca de la ciudad de Tanga, tiene un clima tropical que favorece la continua producción de té en Tanzania durante todo el año.
Esta área tiene temperaturas relativamente constantes y una humedad alta, lo que facilita dos temporadas principales de cosecha: una temporada de lluvias prolongadas de marzo a mayo y una más breve entre agosto y diciembre.
Kagera
En el noroeste del país, en la región de Kagera, el té se cultiva cerca de las orillas del Lago Victoria, donde las condiciones son similares a las de Usambara.
El té de Kagera, al igual que el de Usambara, se caracteriza por su alta cafeína y robustez, y es utilizado en mezclas para mercados globales.
Sin embargo, Kagera también está experimentando un lento crecimiento en la producción de tés ortodoxos y verdes, especialmente en pequeñas fincas familiares.
Los tés más populares de Tanzania
Té negro CTC
El té negro CTC (Crush, Tear, Curl) es la variedad predominante en Tanzania, representando más del 98% de la producción nacional. Este estilo mecanizado produce una infusión fuerte, vibrante y rica en cafeína, muy valorada en mercados internacionales como Europa y Pakistán.
Su intensidad y versatilidad lo convierten en un componente esencial para mezclas tradicionales y tés especiados. Además, es un pilar de la economía tanzana, reflejando el enfoque práctico y eficiente del país hacia la producción de té.

Té ortodoxo
Sin embargo, Tanzania también está ganando terreno en la producción de tés ortodoxos. Estos tés, procesados de manera más artesanal y en lotes pequeños, se destacan por su calidad premium y su sabor equilibrado, que resulta de un tratamiento meticuloso de las hojas.
Este enfoque está captando el interés de mercados especializados, donde la demanda por productos únicos y de alta gama continúa creciendo.
Té verde
Más allá del té negro, en Tanzania el té verde está ganando popularidad gracias a su frescura y perfil saludable.
Este tipo de té, cuidadosamente procesado para conservar sus notas vegetales limpias, es una opción atractiva para consumidores en busca de alternativas naturales y ligeras.
Té blanco
Tanzania también está experimentando con la producción de té blanco, una variedad que destaca por su delicadeza y proceso de recolección manual de los brotes más tiernos. Este té, con su textura sedosa y dulzura sutil, añade un toque exclusivo al repertorio del país y atrae la atención de los conocedores más exigentes.
La creciente diversidad de tés en Tanzania, desde el CTC hasta el ortodoxo y el verde, refleja un cambio hacia una producción más refinada y especializada, lo que permite al país atraer tanto a mercados tradicionales como a consumidores más exigentes.

Costumbres y tradiciones del Té en Tanzania
Si bien el té no tiene la misma centralidad en la vida social tanzana como en países como China o Japón, sigue siendo una bebida esencial en la vida cotidiana.
En las zonas rurales, especialmente en las comunidades cercanas a las plantaciones, el té se consume regularmente durante el día, a menudo acompañado de leche y azúcar. En las ciudades, el té se disfruta en pequeños cafés locales, donde se sirven tazas con leche evaporada o azúcar, al estilo africano.
Las ceremonias de té en Tanzania no son tan elaboradas como en otros países, pero en algunas regiones como Kagera, el té juega un papel central en las celebraciones locales y reuniones familiares. En estas reuniones, compartir una taza de té simboliza hospitalidad y unidad, un momento para conversar y disfrutar de la compañía.
Conclusión
Sin lugar a dudas, Tanzania se está consolidando como un referente clave en la producción de té, destacándose por su capacidad para ofrecer productos de alta calidad que atraen tanto a mercados tradicionales como a nichos más especializados.
Su enfoque en la sostenibilidad y el aprovechamiento de un perfecto terroir lo ubica en una posición única para ofrecer tés que satisfacen una amplia variedad de gustos y preferencias.
La diversificación de su industria, con un aumento en la producción de té ortodoxo y verde, abre nuevas oportunidades para los profesionales del té que buscan explorar mercados emergentes. La continua evolución de su sector subraya el creciente potencial del país para convertirse en un líder global en la producción de té.
Con una tradición que se adapta a las tendencias actuales, Tanzania se perfila como un destino fascinante para aquellos que buscan calidad, innovación y autenticidad en el mundo del té.